26 Abr 5 keys

Al igual que los adultos, los niños también afrontan conflictos y hay que ayudarles a saber gestionarlos. Son muchas las ocasiones en las que quieren lo mismo que tienen los demás, o no les gusta el menú del día o, simplemente, sus necesidades son diferentes y todas estas cositas, pueden generar altercados. Y, aunque a priori pueda parecer algo negativo, podemos aprovechar la oportunidad para estrechar vínculos afectivos, por ello, es muy importante que los peques tengan pautas que seguir para tratar el pequeño problema.

En Family School, como profesionales en Educación Infantil, os dejamos en este post algunas pautas y técnicas de resolución de conflictos que esperamos os sean útiles!

¿Qué hacemos en Family School ante un conflicto?

• Identificamos el problema. Lo primero de todo es que nuestros buhitos vean cuál es el problema y sean capaces de expresarlo correctamente. El objetivo es que cada niñ@ sea capaz de verbalizar cúal es el problema y cómo ha surgido el enfrentamiento.
• Generamos soluciones. Cuando ya conocemos cuál es el problema o qué lo ha causado, pensamos la mejor solución para cada caso. En el caso de los más mayores, antes de dar la solución, permitimos que ell@s piensen sus propias soluciones, ¿cómo lo hacemos? Pues con una simple pregunta, What can we do?
• Probamos una de las soluciones. A veces, la primera solución no funciona, así que no pasa nada, utilizamos el ensayo-error hasta dar con la acertada.
• Recordamos a los peques los pasos que hemos seguido hasta resolver el problema. Recordar el proceso los ayuda a interiorizar los pasos para encontrar una solución de manera independiente más tarde.
•  Felicitamos a nuestros buhitos por haber solucionado el problema.

Beneficios de las técnicas de resolución de conflictos

Son muchos los beneficios que se pueden conseguir si enseñamos a los peques los pasos para solucionar un conflicto. Una gestión adecuada, ayudará al niñ@ a:

• Conocer las propias emociones.
• Desarrollar su capacidad de empatía.
• Reforzar su autoestima.
• Escuchar y dialogar.
• Estimular el pensamiento reflexivo y crítico.
• Desarrollar la creatividad.
• Tener una expresión corporal relajada durante el conflicto.

5 consejos para solucionar un conflicto

Tras nuestros años de experiencia, en Family School sabemos bien qué técnicas favorecen un ambiente idóneo para aportar soluciones.  Por lo tango, os animamos a que tengáis en cuenta los siguientes consejos:

1. Es muy importante que los peques estén calmados porque mientras estamos molestos, difícilmente surgirá una solución adecuada.
2. Disculparse. Animar a los niñ@s a disculparse ayudará a que haya un diálogo y se den las posibles soluciones.
3. Empatizar. Cuando son capaces de ponerse en el lugar del otro, la resolución del conflicto será más rápida y eficaz.
4. Servir de ejemplo. Como bien sabemos, los niñ@s apreden por imitación, así que si observa en el adulto que hay distintas formas de abordar un problema, intentará hacer lo mismo.
5. Juegos de rol. Estas actividades permiten a los niñ@s valorar distintas perspectivas y hacen que vean el problema como algo natural.

Recordad que la capacidad para resolver conflictos es muy importante para el control de las emociones. Es un proceso que implica habilidades cognitivas como la creatividad, la memoria, la comprensión…